domingo, 9 de mayo de 2010

Dos de la mañana, y yo como siempre, noctámbula. Es casi inevitable para mí, además del hecho de tener que luchar con mis ojos abiertos cuando no estoy cansada al extremo por las pocas horas de sueño, el no ser una persona normal como los demás mortales y acostarme a dormir 8 horas cada día, que realmente es imposible, porque mis 20 horas mínimas dedicadas al diseño de los últimos dos años me lo impide. Pero debo aceptar hoy, como no muchos de los días anteriores, y por mi desorden de corazón y confusión de mi cuerpo y mente, que mi vida es hermosa. Tengo lo que cualquier otro desearía tener en su vida: una familia, rara, grande, complicada, incumplida, pero familia, y hermosa, incluyendo al hermanito que nunca pude tener, pero que tengo gracias a ella; amigos verdaderos, lejos, alejados, casi inencontrables, confundidos, pero amigos, amorosos, y honestos; mi diseño, exigente, sofocante, caprichoso, pero mío por fin!! qué más puedo pedir??

No, definitivamente hoy no necesito nada más...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario