martes, 29 de mayo de 2012

Un poquito de fuerza para decir no, un poquito de fuerza para desdoblarme y observarme desde afuera, entender que esa que sufre y llora por no ser amada como desea, en realidad merece algo mejor. Parece que los pulmones lentamente comienzan a moverse, como por obra de la naturaleza, ni siquiera a voluntad propia, sino porque el organismo insiste en sobrevivir. Esta vez la decisión no estuvo en mis manos, sino en mis piernas, que quieren correr para salvarme.

domingo, 27 de mayo de 2012


¿En qué parte del cerebro se elaboran el amor y las emociones?
El cerebro emocional es muy viejo. Es el cerebro truhán, el de los reptiles, donde no existen más que patrones de acción fijos; por eso ellos se acercan o se van si quieren comida; atacan si quieren defenderse, y tienen sexo si quieren reproducirse. Así mismo es el amor...
Si es tan simple, ¿entonces por qué se le da tanta importancia?
Porque el sexo, que es vital para la reproducción, está involucrado. En el afán de controlarlo, por razones sociales, se ha modulado ese patrón cerebral de acción fijo al punto de convertirlo en algo vital para todos.
En definitiva, ¿qué es el amor?
Es un estado funcional, como una golosina, y los enamorados son golosos ("que me ame, que me ame"). Eso hace que se sienta rico y que se activen los sistemas de gratificación. Por eso gusta. Claro, eso es indistinto de lo que se ame o a quién se ame. Amar la plata o a alguien del mismo sexo es, funcionalmente, la misma vaina. Eso sí, nunca es demasiado, nadie se muere por exceso de amor. No es como la epilepsia.
¿Y el amor a primera vista?
Funciona como en el cerebro de los pájaros: el patrón de acción fijo estaba activado, disponible y listo cuando apareció la persona que le gustó, y listo.
¿Y el amor eterno?
Ese es de inteligentes que estructuran y modulan los patrones de acción fijos sobre la base de ver al otro como la mano de uno. Cuidarla es mi responsabilidad y viceversa. Saber que no habrá puñalada trapera es la norma. ¡Nunca, primero me matan tres veces! Esa es la clave neuronal del amor eterno, la que mantiene el estado funcional activo y bloquea cualquier cosa que le sea contraria. Es una calidad de estado mental. Si se entiende no hay otra posibilidad que amar al otro; en cambio, querer acostarse con otro y pasarla rico no es amor. Amor es compromiso y cerebralmente está en el cerebro truhán. Uno no se enamora de una mujer porque tiene unas tetas buenísimas, uno se enamora de su cerebro, porque con él se interactúa y se avanza, con las tetas no. Amar es cerebralmente un baile y hay que bailar con el que pueda danzar con el cerebro de uno. Amar es bailar, no hacer gimnasia. Encontrar eso es muy difícil; hallarlo es un tesoro.

Segmento de entrevista a Rodolfo Llinás. Hoy, 27 de Mayo de 2012
Emo...??
puede ser... qué más puedo decir...


jueves, 10 de mayo de 2012

Ahora resulta que si tienen intenciones facilistas, con decir la verdad es suficiente
Pues no.
La verdad no excusa la intención
Y la intención es oscura si no hay verdad
Me resisto a pensar que solo puedo tener una de las dos

martes, 8 de mayo de 2012

Ves?? hacía falta que te fueras para obligarme a dejarte.
Ya no quiero seguirte a todas partes, ir por el mundo buscando tu amor.
Ya no es suficiente con saber que me amaste y no quisiste hacerme daño, si al final duele lo mismo.
Tal vez tengo miedo de seguir adelante, pero ya no temo decirte que puedes irte.
El amor siempre fue amor, y nunca dolor.

sábado, 5 de mayo de 2012

Con dolor de dignidad...
Darse por vencido en los intentos nunca te deja satisfecho. No es suficiente con sentir vacías las reservas de las ganas de volver a empezar. Entonces qué hago?? Es incómodo estar sentado sin que nada pase, sintiendo la inercia de haber caído una vez más. Es como cuando caes de espaldas con un golpe seco y te quedas sin aire: sabes que no queda nada, que aunque duele y quieres volver a respirar, en esos momentos tu angustia no sirve de nada, el cuerpo mismo se recupera en su debido momento. Y a veces no pasa.

Yo estoy esperando. A ver si puedo respirar de nuevo. A ver si puedo comenzar de nuevo.

jueves, 3 de mayo de 2012

Soy más productiva en la madrugada. Sí. Soy más productiva en la madrugada. No como ahora que me siento a escribir tonterías, desplazando mis horas de comida, sueño y chamboneada de trabajos.
Soy más productiva en la madrugada, cuando te miro y no pienso en tí, cuando me despierto con la mente relativamente en blanco, después de haber esquivado una que otra pesadilla. Cuando el frío me sofoca en las cobijas y mi cuerpo se aferra a ellas para conservarse tibio. Cuando mi mente lucha por acallar el inconciente y despertar del letargo de unas pocas horas de sueño, y trata de arrancarme de la cama y sacudirse el cansancio. Soy más productiva en la madrugada, a pocas horas de la entrega de lo que sea y con los sentidos puestos completamente en un solo objetivo, sabiendo que es ahora o nunca, que después de ese momento ya no habrá nada de qué preocuparse.

miércoles, 2 de mayo de 2012

El cólico, la hipersensibilidad al frío, el antojo de arrunche matutino, el dolor en los senos como si unos días al mes tuvieran creciemiento adolescente (y no crecen!!), las ganas de no levantarse de la cama, el mal genio provocado por cualquier mínimo suceso.... el llanto nocturno propiciado por la cosa más extraña, como ver alguien en la tv haciendo el ridículo, o como escuchar a Kaled Morales (????)

Luchar contra las hormonas
Definitivamente es cierto que ser mujer trae sus pormenores