jueves, 2 de febrero de 2006

Martes 15 Nov. 2005

Pese a todo esto que he escrito, que hoy después de tanto tiempo no lo veo tan vago, yo sigo pensando que estás ahí, que esa sombra sigue rondando en algunos lugares de mi habitación, a veces me mira en la noche mientras intento dormir, y yo la siento, así, de esa manera tan burlona, tan paciente, esperando a que la piense de nuevo para poder ser real. Yo se que no te he olvidado aún, no del todo al menos, y se que a pesar del tiempo y de las risas trancadas en la garganta no hay otros quereres más que tú, no hay otras ilusiones verdaderas, sino solo pasajeras, de esas en las que escarbas desesperadamente buscando una razón para tratar de dejarlas metidas, pero al final no encuentras fondo, y de nuevo caes en la frustrante realidad en la que sigues queriendo al mismo, aunque claro, yo se que a ti no te pasa, tienes tantas agallas y experiencia que te sonará hasta tonto, se que no intentas ni siquiera sentir, pero tú crees que contigo yo lo intento??, si pudiera te ahogaría, pero ya traté entre lágrimas y licor y no lo logré, tuve que darme cuenta que me estaba ahogando yo misma para poder salir de la piscina de basura que me regalaste. No lo sabes, pero yo lucho con esos días cada día, me resisto a pensar que no puedo superar el hecho de haber tenido a alguien que no existe, que aún después de saberlo sigo teniendo las risas trancadas en la garganta y el tiempo sigue pasando, si, y cada día me siento más sola, porque se que lo estoy, pero cada día me siento más entre cáscaras de huevo.
Te odio con toda mi alma, no quiero verte, tu recuerdo me hace llorar, me recuerda que estoy sola, que no llegará nadie para preguntarme qué me pasa, mucho menos para consolarme. Por que ya he pedido lo mismo tantas veces que perdí la cuenta. Y en el fondo se que no va a pasar así, creo que estoy condenada a cumplir la tradición familiar.

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